Hay muchas opciones para garantizar el bienestar y la tranquilidad de nuestros mayores: cuidadores profesionales, residencias de ancianos, centros de día, la atención de familiares… Si tú, al igual que muchas otras personas, has decido ser quien se encargue del cuidado de ese familiar de la tercera edad que ya comienza a necesitar ayuda, hoy queremos compartir contigo algunos consejos para los familiares que cuidan de sus mayores. Toma nota para hacer esta labor mucho más llevadera y eficaz.

Marca unos límites

Que esta sea la primera recomendación de la lista de consejos para los familiares que cuidan de sus mayores, no es ninguna casualidad. Se encuentra en esta posición porque realmente es lo más importante de todo. Decidir hacerte cargo del cuidado de tus mayores es algo encomiable y que no todo el mundo está dispuesto a hacer. Eso sí, para que puedas llevar a cabo esta tarea de forma más llevadera y que se trate de algo que pueda prolongarse durante un tiempo, lo más importante es que no te olvides de ti.

Por eso, hablamos de límites. Marca los tuyos, atiende tus necesidades y procura dedicarte tiempo para ti: practicar tu deporte favorito, tener una vida social activa… Y es que cuidar a una persona mayor no significa que pongas todo tu tiempo a su disposición. Trata de hablar en primer lugar con la persona dependiente y acordad unos horarios en los que tú puedas disfrutar de tu tiempo sin preocupaciones. Esto hará que sigas manteniendo tus rutinas, en la medida de lo posible, y mejorará y motivará tus ganas de seguir cuidando de quien lo estás haciendo.

Haz el espacio más accesible y seguro

Aunque la persona mayor a nuestro cargo viva en la casa en la que siempre lo ha hecho y se conozca cada rincón como la palma de su mano, lo cierto es que cada vez le será más difícil desplazarse por ella de forma segura. Por eso, instalar barandillas y agarradores en los puntos en los que sea necesario, adaptar la ducha o instalar una silla que ayude a subir las escaleras sin esfuerzo, es clave para garantizar su seguridad y alargar el tiempo de autonomía de las personas mayores.

Estimula el envejecimiento activo

Los juegos de memoria, la lectura, los ejercicios suaves e incluso una partida de cartas, pueden resultar actividades muy beneficiosas tanto física como mentalmente. Además, marcar un horario en el que realizar este tipo de actividades, os ayudará a crear una serie de rutinas en el día a día. Algo que es muy importante que las personas mayores sigan para mantenerse orientadas en todo momento.

Busca apoyo emocional

El cuidado de una persona mayor puede ser en muchas ocasiones una tarea dura en lo emocional. Por eso, es muy importante que te apoyes en tus familiares (aquellos que además compartes con la persona a la que cuidas), y les hagas saber tus necesidades y cómo te sientes para que puedan ayudarte en lo que necesites. Por supuesto, acudir a terapia puede ser ese soporte que necesitas para continuar manteniéndote fuerte en esta tarea.

La comunicación es lo más importante

Como familiar cuidador, pasas muchas horas junto a la persona mayor a la que estás cuidando. Aprovecha estos ratos para conversar y planificar el futuro en cuanto a la asistencia que desea recibir si llega el momento en el que necesite ayuda profesional sanitaria. Esto os ayudará a estar más tranquilos y a ti, como cuidador, te hará saber qué decisión debes tomar llegado el momento.

Recuerda que no eres un profesional

Cuidar de un anciano es una profesión especializada. Por este motivo, es importante que pidas ayuda si lo necesitas. No hay nada de malo en solicitar ayuda socio-sanitaria a domicilio o pedir plaza en una residencia de ancianos.

Son muchos los familiares que comienzan a cuidar a sus mayores con toda su voluntad y cariño pero que, a la larga, terminan por pedir ayuda profesional al no estar capacitados para cubrir las necesidades de los ancianos. ¡Y por supuesto que es la mejor decisión que puedes tomar! Ten en cuenta que otro de los consejos para los familiares que cuidan de sus mayores que más presente debes tener, es el de procurar su bienestar. Y esto, a veces solo pueden garantizarlo los profesionales o las instalaciones adaptadas 100% para personas mayores.

Nuestras residencias de ancianos en Madrid están a disposición de los ancianos y de sus familiares para que ambos puedan sentirse tranquilos y cómodos en su papel. Y es que cuidar a tus mayores y dedicarte a ellos es una tarea muy loable, pero no puedes permitir que suponga un perjuicio para ti como persona y cuidador. ¡Confía en profesionales cuando lo necesites!

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